Puntos negros para los peatones en el Centro de Madrid. (Ideas para mejorar la ciudad)
Caminar por el centro de Madrid no siempre es fácil.
En la imagen superior: La calle Atocha en la esquina con la plaza de Santa Cruz. Entre la parada de autobús y el ascensor, decenas de motos sobre la acera, señales de todo tipo, cubos de basura…
Si los peatones comunes lo tenemos difícil para pasar, imaginad cómo lo tienen los que van en silla de ruedas.
En esta imagen vemos la calle Ciudad Rodrigo, frente al mercado de San Miguel, una zona saturada de paseantes. A la hilera de horrendas señales informativas su unen los aparcamientos para vehículos de dos ruedas (motos y bicis) y unas bolas de piedra. Para pasar por ahí hay que dar un buen rodeo.
Este tramo de la calle de Bailén, a la altura del Senado, por el que pasan a diario miles de peatones y de turistas, es incomprensiblemente estrecho, y para colmo han colocado una farola enorme que ocupa la tercera parte del angosto desfiladero.
Claro que para desfiladeros, la zona de Peligros, Alcalá, Sevilla, Plaza de Canalejas y Carrera de San Jerónimo. Desde hace dos décadas, pasear por la acera es difícil, y cruzar la calle, peligroso y complicado. Posiblemente, lo peorcito de la movilidad en Madrid.

 

Y ¿qué decir de los chirimbolos? como este, que ocupa la mitad de la acera, en los bulevares. Y algunas paradas de autobús mal colocadas, y los caballetes anunciadores que ponen ciertos comercios…
Lo dicho: ¡A tapar la calle, Que no pase nadie!
Fotos: Carlos Osorio.