Mucha gente ha luchado y ha dado su vida para que en España tengamos libertad de expresión. Hemos luchado por la libertad de todos y también por la libertad del artista Santiago Sierra. Si este artista quiere quemar una imagen del jefe del Estado de un país democrático, e incluso asociar su imagen a la de un tirano, pues que lo haga, está en su derecho.

Si a este artista le parece que la derecha y la izquierda son lo mismo, que da igual quien gobierne porque todos le parecen unos tiranos, pues  que lo diga, está en su derecho.

Si le parece que los políticos presos son presos políticos, que lo diga. Pasamos por alto que esos políticos han intentado un golpe de Estado, han enfrentado a la población con las fuerzas del orden para conseguir sus objetivos, y están llevando a la ruina a su comunidad. Lo pasamos por alto.

Pero nunca se le olvide, señor Sierra, que si usted puede hacer uso, incluso abuso, de sus derechos, es porque esa gente a la que usted critica y a la que considera tiránica, ha luchado para que usted pueda ejercer su libertad, y también para que usted pueda ganar grandes cantidades de dinero con sus provocaciones. Nunca se le olvide, porque tal vez algún día alguien podría pensar que aquí, el único tirano es usted.