El nombre de caña viene del tubo por el que sube la cerveza desde que sale del barril hasta que brota del grifo. Este tubo vertical o «caña» (palabra emparentada con caño y con cañería) es el que da nombre a la cerveza servida a través de un grifo.
En los tiempos antiguos de Mesopotamia y Egipto la gente dejaba fermentar la cerveza en vasijas de barro y con frecuencia la bebían valiéndose de una caña hueca para evitar tragarse la espumilla y otras impurezas que se formaban encima del líquido.
Pero el término caña no tiene que ver con aquella práctica, sino con ese tubo con forma de caña que mediante presión hace manar el preciado líquido dorado y espumoso. Hace tiempo supe de la existencia de unos ingenios para hacer brotar el agua desde el subsuelo que se llamaban pajas y tenían forma precisamente de cañas o tubos, primitivos sistemas de bombeo para extracción de agua. Estas pajas o cañas de agua (términos hoy en desuso) podrían tener alguna relación semántica con nuestras queridas y reconfortantes cañas de cerveza.
¡Cómo se nota cuando un camarero profesional de la hostelería tira bien la cerveza! Una cerveza bien tirada, con su debida proporción de espuma. Veo a los camareros con su pala de plástico limpiar la espuma cuando sube demasiado y la deja reposar antes de seguir echándola en el vaso de la caña. Me gusta el nombre ya tan español de "caña", como la famosa "Pinta" de los británicos.
Insisto de todas formas: ¡Viva también el vino! ¡Que también lo hay de Madrid!…Navalcarnero, San Martín de Valdeiglesias, Arganda, Colmenar de Oreja…..
Saludos.
Saludos Juan, brindo por lo que dices.
Cuanta razón hay en lo dicho por este hombre vivan las cañas, los vinos y yo llego asta los queridos vermuts de los domimgos eso si siempre con buena tertulia y muy ,muy,buena compañia
La expresión madrileña de " caña " viene dada por la pequeña caña que utilizaban los aguadores de la Villa, una larga par llenar los cántaros y una pequeña, al cinto, para cubrir su necesidades, cuestion de higiene, con el tiempo el pasame la caña se quedó con el ponme una caña.