Me encanta esta foto de Pio Baroja tomada en 1950 por Nicolas Muller. La luz crea una escalera de sombras por la que desciende el caminante. La oscuridad del abrigo representa la vejez y la barba del escritor es el máximo blanco, el blanco del papel. Don Pío vivía en el barrio de los Jerónimos y daba cada día su paseo por El Retiro, hecho que recuerda una estatua que ha sido colocada en lo alto de la cuesta de Moyano.