Madrid ha mirado siempre con curiosidad hacia París, como mira la hermana pequeña a su hermana mayor. París es tres veces más grande. Grandes son sus avenidas, sus plazas, sus puentes y sus edificios. Madrid es más “pueblo”. Me encanta París, pero a veces prefiero esa condición popular, cercana, familiar, del foro.
El río de París es un río, el de Madrid es un arroyo. Nuestra Puerta de Alcalá es más bella que el Arc de Triomphe, pero aquí no tenemos una torre Eiffel.
En París se mueve mucho más dinero que en Madrid, los sueldos duplican a los de aquí.

En Madrid proporcionalmente hay más actos culturales que en París (teatro, conciertos, exposiciones)
El Louvre es inmenso, el Prado más pequeñín, pero la colección de pintura europea del Prado no tiene parangón.
En cuanto al arte contemporáneo, me gusta más la colección del Reina Sofía que la del Pompidou.
La arquitectura contemporánea, salvo pequeñas excepciones, deja bastante que desear, lo mismito que en Madrid.
Disneyland es una preciosidad, pero algunos dicen que se lo pasan mejor en el parque de atracciones de Madrid.
En París no tienen montañas, aquí tenemos la Sierra. Allí llueve casi siempre, aquí muy poco.
Madrid tiene el triple de kilómetros de autovías que París, y menos atascos. Aquí hay un Metro más moderno y nuevecito que el de la capital francesa. 
En los cafés de París las mesas son diminutas. En Madrid hasta puedes estirar las piernas.
Una caña te cuesta allí tres o cuatro veces más.
La comida rápida está desbancando a la cocina francesa, lo mismo ocurre aquí con nuestra cocina.
En París no hay tantos centros comerciales y grandes superficies como en Madrid.
Muchos inmigrantes en las calles. Allí se nota más la diferencia de clases. Aquí están más integrados.
Muchos indigentes en las calles de París, igual que en Madrid. A nuestros respectivos gobiernos es un problema que les trae sin cuidado.
Bastantes carteristas en París, lo mismo en Madrid, ante la pasividad de las autoridades.
En París la gente es más amable y educada que en Madrid (hace unas décadas era al revés)
 Impresiones de un caminante por Madrid y por París.

Foto: Carlos Osorio.