Labonata, en la plaza de Chueca, un lugar de interés para los fanáticos de los buenos helados.
Fundada por holandeses expertos en helados italianos (interesante mezcla), abrió en el año 2009.
Son sucesores de un artesano holandés de los años cuarenta que comprendió que el sabor cremoso de los helados necesitaba un poco de nata, de ahí el nombre: labonata.
Cualquiera de sus múltiples sabores merece la pena, pero los caprichosos encontrarán sabores poco habituales: galleta, menta, bergamota…

Labonata, Plaza de Chueca nº 8.