La regentan doña María Jesús y doña Ángela García, que aunque ya van teniendo unos añitos, atienden con esmero y amabilidad a sus clientes. La fachada presenta una hermosa tipografía en metal de las que se ven pocas. Llaman la atención sus abigarrados estantes, llenos de toda clase de objetos metálicos. Los clientes de toda la vida gustan de pasar un buen rato conversando con las dueñas mientras adquieren algunos tornillos u otros artículos. Aquí el tiempo parece haberse detenido.
María Jesús aprovecha un ratito en que no entra nadie para regar las múltiples plantas de interior que decoran el local. En cierta ocasión, hablando con ella, me contó una historia sobre unos posibles restos de una iglesia en el sótano del local; pero esto os lo contaré mañana.
Fotos: Carlos Osorio.
Vaya, nos dejas con la intriga , esto va por "entregas" 🙂
Un saludo desde mi Madrid del alma,
Mayrit
Hola, Mayrit. Un saludo. Pues sí, a la próxima entrega hay que darle un poquito de emoción, así tiene más gracia.:)