Desde 1949, esta tradicional corsetería de la calle Espoz y Mina iluminaba sus escaparates con unas encantadoras letras de neón. Letras en la línea del excelente diseño de los cincuenta. Lejos de los espantosos rótulos luminosos que se hacen hoy en día. Adios a uno de los pocos comercios que aún se adornaba con neones, además de los cristales curvos y el suelo de mármoles. Fajas Ruiz acaba de cerrar definitivamente. Esta casa tenía patentado el llamado cinturón sacroilíaco, recomendado para lumbalgias, obesidad y eventraciones. No sé si seguirá abierta la sucursal de Narváez, creo que sí.
Foto: C. Osorio.