Tal día como hoy, 4 de Abril, de 1910, dieron comienzo las obras de la Gran Via madrileña. En un gesto simbólico, el rey Alfonso XIII golpeó con un pico en los muros de la antigua Casa del Cura (en la esquina con Alcalá). El gesto dio lugar a algunos chascarrillos jocosos en la prensa republicana, sugiriendo que por fin el rey hincaba el pico.
Nuestra calle más guapa cumple su centenario y es un motivo de enhorabuena para los madrileños. Es un buen momento para conocer mejor la calle, para ver qué cosas se pueden mejorar, para restituir los elementos arquitectónicos que han ido perdiendo algunos edificios, para revitalizar la cultura y el comercio de calidad. Felicidades, Gran Vía.
Me sumo a tus deseos Carlos, muchas felicidades para la Gran Vía, que su futuro sea el mejor, pues en cierto modo es el espejo de Madrid.