Los viejos leones que adornaban el monumento a Alfonso XII, junto al estanque del Retiro, fueron sustituidos por copias realizadas en bronce. Las copias de bronce no tienen la calidad que tenían los originales, que fueron realizados por seis de los mejores escultores del realismo de principios de siglo (Francisco Escudero, Antoni Bofill, Agapito Vallmitjana, Pedro Estany. Eusebi Arnau y José Campeny)
Es cierto que los originales estaban deteriorados, sobre todo por la acción de los gamberros, pero se podían reparar. Lo que no es de recibo es que estén al aire libre, donde llevan más de una década, sufriendo la acción de la intemperie, en el almacén de materiales de la Casa de Campo, conocido como «La Casilla»
El sitio de estas esculturas debería ser un museo.
Foto: Carlos Osorio.