El viernes 9 de Septiembre falleció en Madrid, a causa de un fallo cardiaco,  Fernando Osorio Páramo (Madrid 16-XII-1942), ingeniero de caminos vinculado al Ministerio de Obras Públicas. Su gran labor fue la creación de la Ley de Costas, de la que fue uno de los principales actores, un paso decisivo en nuestro país para proteger el medio ambiente costero, gravemente dañado por la especulación urbanística.
Osorio comenzó su carrera en 1969 en el Ministerio de Obras Públicas, integrándose en 1977 en el Cuerpo de Ingenieros. Fue nombrado subdirector general de Costas en 1987 y director general de Costas en 1991. En 1996 fue nombrado presidente de Puertos del Estado. De su valía profesional da fe el hecho de que fue requerido sucesivamente por los gobiernos de la UCD, del PSOE y del PP.
Se mantuvo siempre fiel a su idea de servicio a la ciudadanía y no hizo ninguna concesión a intereses de particulares ni de grupos. Su vocación hacia lo público le llevó a dedicar toda su energía a su labor, descuidando otros aspectos de su vida personal. De vida solitaria, sus únicas pasiones conocidas han sido el Real Madrid y los largos paseos por la ciudad y el campo. Como gran caminante que fue, promovió muchos lugares para que la gente pudiera pasear, en forma de paseos marítimos en localidades costeras y senderos litorales en zonas naturales. Ahora pasea por esos cielos que barruntan el otoño. Hasta siempre, Tío Fernando.