Que los barrios tengan vida propia, que los vecinos nos conozcamos y hablemos entre nosotros.
Que demos vida al pequeño comercio que da vida a nuestras calles.
 Recuperando las fiestas populares.
 Manteniendo abiertos los cines y espacios para la cultura. Haciendo que los centros culturales municipales se conviertan en centros de encuentro, convivencia y creatividad.
Cerrando algunas calles los domingos para que los niños salgan a jugar.
Bajándose la silla a la calle.
Estableciendo lugares para el ocio compartido: patinar, leer, jugar al ajedrez.
Organizando conciertos y bailes en las plazas y parques.
Disfrutando de la Vida de Barrio.
Foto 1: Martín Gallego
Foto 2: La Vanguardia