Aunque nadie parece darse cuenta, en la catedral de La Almudena existen algunas marcas de metralla producidas por los bombardeos durante la guerra civil.
En el interior, estas marcas se hallan junto al cristo yacente de Juan de Ávalos, cerca de la capilla del Santísimo.
Hay que recordar que en esta época la catedral estaba a medio construir.

En el exterior, la metralla dejó su huella en la Cuesta de la Vega, a la derecha del pórtico que da entrada a la cripta.

Fotos: C. Osorio.