Esta mañanita he ido a ver uno de los espectáculos más bellos que pueden verse por estas fechas: la floración del almendro. Estaba seguro que por la fecha que era y por los tres días cálidos seguidos que ha habido, el milagro tenía que estar empezando a suceder. Efectivamente. El viejo almendro del Parque del Oeste (situado junto a la via del tren y la casa de la dirección de Parques Históricos) estaba en flor. Ojalá que las próximas heladas no malogren este esfuerzo de los frutales por crear vida y belleza.
Dos buenos sitios para ver almendros son: la Dehesa de la Villa y la Quinta de los Molinos, en Suanzes.

Fotos: Carlos Osorio