Médicos y científicos nos cuentan cómo salir a la montaña puede cambiar nuestras mentes y mejorar nuestra calidad de vida.

“La paz de la naturaleza fluirá dentro de ti como lo hace la luz solar dentro de los árboles. Los vientos soplarán su frescura en vosotros y las tormentas su energía, mientras que los cuidados caerán como hojas de otoño,” escribió John Muir en Our National Parks. Claramente John Muir entiende el valor intrínseco de pasar tiempo en la naturaleza.

Igual que Muir, muchos de nosotros reconocemos que el senderismo en la naturaleza es bueno para cuerpo, mente y alma. Caminar a través de los bosques mientras observamos pájaros de todos los colores, mientras olemos el aroma de los pinos y abetos y escuchamos la calma de un arroyo… todo esto despeja nuestra mente y nos hace sentir bien. Por suerte para nosotros, los médicos lo aprueban. Estudios tras estudios nos muestran que hay muchos beneficios para la salud mental cuando pasamos tiempo yendo a la montaña. He aquí unos pocos:

Salir a la montaña reduce la negatividad

Aquellos que se lamentan en exceso, o se concentran demasiado en sus pensamientos negativos, pueden exhibir ansiedad, depresión y demás problemas derivados. En un estudio reciente, los investigadores demostraron que pasar tiempo en la naturaleza afecta positivamente para no agobiarnos, así como encontraron que el senderismo reduce los pensamientos obsesivos y negativos.

En este estudio, los investigadores compararon la rumiación reportada por los participantes que, por una parte, caminaban a través de un entorno urbano y, por otra, en un entorno natural. Encontraron que aquellos que caminaban durante 90 minutos en un entorno natural, reportaron menores niveles de rumiación y negatividad, así como redujeron la actividad neuronal en la corteza prefrontal, asociada con enfermedades mentales. Aquellos que caminaron por un entorno urbano no disfrutaron de dichos beneficios.

Los investigadores indicaron que nuestro mundo se está urbanizando cada vez más y que dicha urbanización está conectada a la depresión y a otros tipos de enfermedades mentales. Así pues, saliendo de vez en cuando de este entorno urbano para pasar tiempo de puertas hacia fuera, en el campo donde hay menos factores estresantes, menos ruido y menos distracciones, puede ser una ventaja para nuestra salud mental.

Salir a la montaña y desconectar de la tecnología aumenta nuestra capacidad para solucionar problemas de forma creativa

De acuerdo con un estudio de Ruth Ann Atchley y David L. Strayer, la solución de problemas de una manera creativa puede ser mejorada desconectando de la tecnología y volviendo a conectar con la naturaleza. En este estudio, los participantes hicieron senderismo durante 4 días, a la vez que tenían prohibido usar cualquier tipo de tecnología. Se les pidió entonces que realizaran tareas que requirieran de creatividad para la resolución de una serie de problemas complejos. Descubrieron los investigadores que aquellos inmersos en las excursiones tuvieron un aumento muy significativo a la hora de resolver problemas en más de un 50%.

Estos investigadores indicaron que la tecnología y el ruido de las zonas urbanas demandan constantemente nuestra atención y nos impiden enfocarnos, perturbando así nuestras funciones cognitivas. Por lo tanto, cuando nos sentimos estresados por la vida urbana, o cuando estamos conectados a la tecnología a todas horas, salir a la montaña puede ser una medicina muy potente: Reduce nuestra fatiga mental, calma la mente y nos ayuda a pensar con mayor creatividad.

Salir a la montaña puede mejorar el Trastorno por déficit de atención en los niños

El trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) es un trastorno bastante común en los niños. Aquellos que lo sufren, generalmente tienen problemas con la concentración, se distraen fácilmente, exhiben hiperactividad y tienen dificultades para controlar sus impulsos.

Criar hijos con el TDAH puede ser extenuante para los padres. No obstante, buenas noticias han surgido del mundo médico y científico. En un estudio realizado por Frances E. Kuo y Andrea Faber Taylor, han descubierto que exponer a niños con TDAH a actividades al aire libre reduce significativamente sus síntomas. Por lo tanto, de acuerdo con el estudio, los beneficios de la exposición a la naturaleza se pueden extender a cualquiera con falta de atención e impulsividad.

Los doctores concluyen que simples cambios que incluyen actividades “verdes” pueden mejorar la atención y disminuir los síntomas del TDAH.

Salir a la montaña es un ejercicio excelente, el cual estimula la capacidad intelectual

Hacer senderismo es una forma muy buena de ejercitarse y puede hacernos quemar entre 400 y 700 calorías a la hora, dependiendo de la dificultad. Otro beneficio añadido es que no es tan duro como otras formas de ejercicio, tales como correr.

Cuerpo y mente están conectados de forma natural. El ejercicio ayuda a mantener nuestras células nutridas y sanas. De hecho, de acuerdo con unos investigadores de la Universidad de British Columbia, el ejercicio aeróbico puede mejorar la memoria y la habilidad cognitiva. En el estudio encontraron que el ejercicio aeróbico incrementaba el volumen del hipocampo en las mujeres mayores. El hipocampo es una parte del cerebro asociada a la memoria espacial y episódica.

El senderismo se prescribe por los médicos

¿Alguna vez te ha dicho tu médico que salgas a la montaña? Progresivamente los médicos son cada vez más conscientes de que la gente que aprovecha su tiempo en la naturaleza, disfruta de menor estrés y mejor salud psicológica.

De acuerdo con WebMD, más y más médicos están recetando “prescripciones naturales” o recomendando “ecoterapia” para reducir la ansiedad, mejorar los niveles de estrés y luchar contra la depresión. Además, las prescripciones naturales se están aceptando cada vez más por los médicos tradicionales debido a los estudios que van aflorando progresivamente, los cuales muestran los beneficios de ejercitarse y de pasar tiempo en la naturaleza.

Por ejemplo, el Instituto Golden Gate ha estado liderando la propuesta de la “ecoterapia” a través de su iniciativa “Healthy Parks Healthy People» (Parques Saludables, Gente Saludable)”. En dicho programa, las organizaciones comunitarias trabajan junto a profesionales de la salud para mejorar la salud de los parques y promover el uso de los mismos como pasadizo a la salud de las personas que los utilizan.

¿Cómo iniciarte en el senderismo?

Afortunadamente, el senderismo es uno de los deportes más fáciles y baratos de practicar, además de ser divertido y beneficioso para toda la familia. Para comenzar, no necesitas marcarte grandes retos. Empieza por lo fácil. Echa un vistazo a rutas cortas y planéalas bien. En internet encontrarás decenas de mapas y aplicaciones para tu teléfono móvil que te ayudarán a descubrir las mejores rutas para tu nivel.

Asegúrate de llevar el mejor calzado para ti y el más apropiado para el terreno. Considera usar bastones que reducirán el estrés de tus rodillas y aumentar tu velocidad, mejorando tu estabilidad. Lleva la ropa necesaria para las condiciones climatológicas y materiales que reduzcan el impacto del sudor y te mantengan calientes. Usa crema solar, gafas y un gorro que te proteja del sol. Hidrátate y, ¡a disfrutar!

Artículo y fotos de LifeHack. Traducido por Sal&Roca.